El primer teniente de alcalde de Barcelona, Gerardo Pisarello, faltó al respeto a la portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Barcelona el martes. La llamó "maestra autoritaria" en la comisión de Economía y Hacienda del ayuntamiento. Lejos de disculparse, el número dos de Ada Colau se limitó a aseverar ayer que "admite la crítica" de que sus palabras fueron desafortunadas.
Erró Pisarello al no prestar más atención durante la sesión de trabajo, se volvió a equivocar al mostrar desdén tras su error y volvió a hacerlo al no disculparse con la presidenta de la comisión: Carina Mejías. Y no es la primera vez que el electo de BComú no comparece o falta al respeto a un concejal de la comisión durante la sesión de trabajo.