Tras declarar hábil la segunda quincena de agosto, la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, mantiene en vilo a los grupos parlamentarios al excluir del orden del día de la Mesa la tramitación de la ley del referéndum.

Todo apunta a una nueva argucia de los partidos independentistas --ellos lo llaman astucia-- para intentar soslayar la acción de la Justicia. Ganarán tiempo, pero nada más.