El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, continúa con su apuesta por el llamado choque de trenes contra el Estado. Este sábado intensificó el tono de su discurso contra el Gobierno al pedir el apoyo unánime al referéndum. Lo hizo en un consejo nacional extraordinario del PDeCAT celebrado un año después de su refundación con un discurso en un tono más preelectoral que presidencialista.
Dio un golpe de mando público en el partido con un mensaje claro: todos sus miembros deben remar a favor del 1-O. Pero Jordi Baiget primero y Mercè Conesa después han hecho públicas las discrepancias en la estrategia independentista de Puigdemont. Sus palabras son contundentes. Su poder real en el seno de PDECat, no.