Borja Manzanares, presidente del COIB
El Colegio de Enfermería de Barcelona (COIB) ha sufrido una dimisión en bloque de uno de los grupos de trabajo. El grupo de cuidados paliativos no solo ha cesado de forma colectiva, sino que ha disuelto el área por discrepancias con la cúpula del Colegio.
La novedad es sintomática de que hay que mejorar cosas en el COIB. El organismo colegial está desempeñando una importante labor para dignificar la figura y reconocimiento de la enfermería catalana, aunque ahora se enfrenta a una vía de agua.
En este contexto, el presidente del COIB, Borja Manzanares, aduce que rectificarán la estrategia con los grupos de trabajo, tornándola mucho más abierta al diálogo. Negro sobre blanco, rectificarán.
Eso sí, por ahora, el puente de mando del Colegio debe afrontar una dura carta pública de dimisión y evitar que la crisis vaya a más. Regir una institución pública precisa de estos esfuerzos: hay que proteger la casa a toda cosa y bregar por preservar la unidad de acción que permita lograr las metas deseadas.
Se trata, pues, de un dosier sobre el despacho de Manzanares.
