El extravangante y polémico columnista y tertuliano catalán Salvador Sostres lanza hoy su artillería opinadora contra Port Aventura. Se trata de la segunda ocasión en la que se cisca con la infraestructura turística en pocos meses. Es más, lo personaliza en el primer ejecutivo del parque de atracciones, su director general, David García. Al parecer, los responsables del recinto tarraconense de ocio han dejado de hacerle caso a sus constantes peticiones y han decidido que no le otorgarán en lo sucesivo un tratamiento de VIP. En respuesta, Sostres se queja del funcionamiento del parque, de la gastronomía, de la “incompetencia” del personal y la gestión de García, al que atribuye una voluntad única de obtención de beneficios a costa de la experiencia de cliente.
Según ha podido saber este medio, esa medida de restringir los accesos especiales se aplica cada vez con más empresarios y personajes públicos. Sin embargo, Sostres desea ser tratado como un VIP y una celebrity aunque su situación diste mucho de serlo. De hecho, el escritor catalán es un opinador de dos medios (uno español, el ABC; y otro local, Diari de Girona) y ejerce como tertuliano allí donde se lo permiten.
'Destrucción masiva'
El sector periodístico y muchos colegas de opinión de los grandes medios consideran que, a la vista de sus últimas entregas, la sección de su columna debería cambiar de nombre y denominarse "Sostres, destrucción masiva”. En los últimos tiempos su pluma apunta contra empresas y personas que han tenido algún tipo de relación con él o que, en algunos casos, rechazan tenerla. En las últimas publicaciones llamaba “tontos” a varios abogados, entre ellos alguno relacionado con Piqué y Shakira (que parece su última obsesión temática) y su reciente ruptura sentimental o contra los “idiotas” de ERC al interpretar las subvenciones públicas que el Govern de la Generalitat ha repartido entre los medios de comunicación.
Fragmento del artículo con el que Sostres pasa cuentas por perder su condición de visitante exclusivo
Aquí un claro ejemplo, Sostres parece tener celos por verse obligado a hacer colas y solo poder acceder al parque de atracciones en el horario normal. No le ha gustado que el jugador del Barça Gerard Piqué sea recibido por todo lo alto y con un tratamiento muy especial cuando acude con sus hijos. Además de que el futbolista mantiene negocios cruzados con la empresa explotadora del parque, en la dirección se opta por estas aperturas exclusivas a algunos personajes públicos para encapsularlos y evitar problemas de aglomeraciones y seguridad alrededor de los famosos cuando acuden con sus hijos.