Cumbres nacionalistas en un restaurante de Barcelona
Barcelona tiene un restaurante que es la versión condal del Café de Rick en Casablanca. Este mediodía de lunes se daban cita en el establecimiento, cercano a Enric Granados, una pléyade de personajes del nacionalismo de lo más pintoresco. Astrid Barrio, David Bonheví y Àngels Chacón ocupaban una mesa donde hablaron de su proyecto de crear una nueva versión de partido convergente que ocupe el espacio abandonado por Junts per Catalunya (JxCat) en su deriva cupera. En la mesa de al lado departían amigablemente David Madí y el periodista Jordi Barbeta y, un poco más allá, dos ilustres caídos, Miquel Buch, exconsejero de Interior, y Eduard Pujol, exportavoz parlamentario de JxCat, compartían mantel y confidencias con otro periodista, Ricard Ustrell. También andaban por allí el editor Fèlix Riera y la escritora Núria Amat, seguramente sorprendidos ante el calado político de la clientela.