Otro caso de disonancia cognitiva del procés, esto es, justificar cualquier tipo de presuntas ilegalidades llevadas a cabo por dirigentes independentistas.

El programa Tot es mou de TV3 abordó el tema de la "judicialización de la política". Y tras referirse a las causas por desobediencia abiertas contra Quim Torra, así como la querella por usurpación presentada por el PP y la euroorden del juez Pablo Llarena contra Clara Ponsatí, se incluyó en el listado la investigación abierta contra la diputada de Junts per Catalunya en el Congreso, Laura Borràs, por sus adjudicaciones a dedo. Es decir, que la televisión catalana equiparó los trapicheos de Borràs con el referéndum del 1-O.