El que fuera jefe de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluís Trapero, dispone de un guardaespaldas que le acompaña en sus trayectos entre Barcelona y Madrid. El escolta es sumamente discreto, pero no invisible, de modo que no pasa desapercibido para los viajeros que comparten vagón de AVE con el mayor.
A muchos de estos viajeros les sorprende que Trapero tenga un escolta personal, dado que el mayor no es un cargo político inexperto en tareas de seguridad, sino un agente bregado con amplia experiencia a pie de calle. También muestran su extrañeza por el hecho de que Trapero, relegado de sus funciones como máxima autoridad policial de Cataluña desde la aplicación del 155, disfrute de un servicio reservado a los políticos.
Por otra parte, los mismos viajeros pudieron constatar que Trapero y Ferran López --su ex número dos-- viajaron el viernes pasado en el mismo AVE en dirección Barcelona, pero en distintos vagones. No hicieron nada por coincidir durante el trayecto.