Torra, campeón mundial de declaraciones institucionales
Quim Torra habría pulverizado el récord mundial de declaraciones institucionales si existiera tal especialidad. El todavía presidente de la Generalitat es un campeón de las comparecencias solemnes, un titán del postureo institucional, un estajanovista de las horas graves, de modo que siempre está dispuesto a realizar declaraciones oficiales. Este mismo mes de enero ya lleva cuatro, los días 3, 10 y 23 a cuenta de su inhabilitación y el 29 para el anuncio de que cuando estén aprobados los presupuestos anunciará la fecha de las elecciones.
Al margen de las declaraciones a fecha fija, como la de Navidad, el 30 de diciembre, y la Diada, Torra ha mostrado especial propensión a utilizar el instrumento de la comparecencia solemne y sin preguntas para hacer política. Así, el pasado mes de octubre llevó a cabo tres comparecencias. La primera, el 1, para celebrar el 1-O; el 14 para criticar la sentencia del Tribunal Supremo y tres días después para hablar sobre la quema de contenedores y ataques contra la policía desencadenados tras la sentencia.
El pasado año compareció también el 9 de abril para respaldar a los procesados por el juzgado de instrucción número 30 de Barcelona y el 23 de ese mes (Sant Jordi) para mostrar su apoyo a los presos y fugados. En 2018 protagonizó una comparecencia institucional en el primer aniversario de los atentados del 17 de agosto; otra (22 de junio) para advertir que asistiría a la inauguración de los Juegos del Mediterráneo pero que rompía relaciones con la Casa Real y una tercera, junto a Torrent, el 2 de noviembre, para criticar la solicitud de penas que hizo la fiscalía para los procesados en el Supremo.
Ningún presidente de la Generalitat había llevado a cabo tantas apariciones formales ante los catalanes como Torra, que será recordado, entre otras cosas, por su propensión a convocar por sorpresa a los medios para dar lectura a sus ocurrencias políticas.