El independentismo radical está dispuesto a hacerse de oír sea como sea. Con manifestaciones continuas, cortes de carreteras, sabotajes a líneas férreas, asaltos a estaciones de tren o el aeropuerto y, ahora, ha decidido no dejar oír a quien no piensa como ellos. Picnic per la república ha decidido que el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, no es bien recibido en Cataluña y están dispuestos a boicotear el acto que celebrará en Viladecans (Barcelona) para cerrar la campaña del 10N.
Poco les importa que los socialistas fueran en las últimas elecciones la segunda fuerza o que en esta localidad de Barcelona tengan mayoría absoluta. Los muy demócratas de PxRepública tildan a Sánchez de persona non grata y, al mismo tiempo, le instan a “negociar”. Ese será el gran objetivo del escrache que le preparan, para el que piden acercarse hasta Viladecans con una silla y un cartel.
Buscan “hablar” sobre los términos de un referéndum de autodeterminación en Cataluña, proclamar la república…y dejar de lado a los millares de catalanes que no están por estas soflamas. Todo ello, un gran ejemplo demócrata.