A Miquel Buch le preocupan los medios de comunicación. El consejero catalán de Interior presidió ayer jueves la primera reunión plenaria del plan estratégico Barcelona Ciutat Segura. Al término de la misma, el titular de Interior dio cuenta del encuentro --que el sindicato policial Uspac tildó de "paripé"--, en el cual se debatieron soluciones a la crisis de seguridad que azota Barcelona. Buch explicó que ocho grupos de trabajo buscarán soluciones a distintos niveles para abordar el fenómeno. También reiteró que la solución más inmediata pasa por endurecer el Código Penal.
Lo que no contó el también exalcalde de Premià de Mar (Barcelona) es que uno de estos grupos de trabajo el de "comunicación", no estaba previsto y se creó ad hoc. A Buch y a algunos asistentes el preocupa el impacto mediático del repunte de delincuencia y, por ello, propusieron debatir sobre la "percepción y comunicación" de la inseguridad. Ello se hará abordando tanto el traslado de información que hacen los cuerpos policiales a los medios como la interpretación que hacen éstos de dichos datos. Está por ver qué conclusiones sacará el grupo de trabajo, en el que no figura ningún periodista.