Josep Borrell, cabeza de la lista socialista en las elecciones europeas del domingo y hombre con amplia experiencia en Bruselas, afronta la recta final de la campaña con un cierto ecepticismo por el riesgo de victoria de los partidos antieuropeístas.
El ministro de Asuntos Exteriores en funciones no cree en una victoria de los eurófobos, que considería una "catastrofe", que también se produciría en caso de que las fuerzas de extrema derecha e izquierda alcanzaran un tercio de la representación en el Parlamento Europeo porque entonces tendrían posibilidad de veto.
Estas fuerzas antieuropeístas podrían ganar en algunos países del Este y del Norte, además de Gran Bretaña, Italia, Francia y Holanda. O sea, que Borrell apunta bien: el domingo podemos estar ante una catástrofe europea, aunque él espera que no ocurra.