José Manuel García Margallo, el exministro de Asuntos Exteriores, está viviendo una segunda juventud en política. Se presentó a las primarias del PP, perdió, pero supo moverse y apostar por Pablo Casado. Ganó y como ganó ahora tiene un puesto importante en el nuevo PP. Es el Pepito Grillo de Josep Borrell y ha levantado la bandera de Gibraltar contra su sucesor en el palacio de Santa Cruz, al que acusa de no saber negociar el Brexit y de perder una oportunidad para alcanzar la cosoberania de la colonia.

Pero su propuesta estrella es unificar el centro derecha en un sólo partido. Margallo considera que es la única manera de vencer a la alianza PSOE-Podemos. Ahí es nada. No sabemos qué piensa Albert Rivera.