Santo Mauro, el santuario
El encuentro casual entre Alfredo Pérez Rubalcaba y Marta Pascal ha dado lugar para todo tipo de comentarios. En fuentes del PDeCAT lo han dejado en “un encuentro casual”, porque desmentirlo era complicado tras la foto publicada por eldiario.es. Pascal había acudido a la capital para entrevistarse con sus abogados: está imputada por el Tribunal Supremo. Tras la reunión se dirigió con Jordi Xuclá, un puntal del PDeCAT en Madrid, al hotel Santo Mauro, un lugar discreto en el centro de Madrid.
El hotel, propiedad de Antonio Catalán, es un santuario socialista. Allí se han celebrado cónclaves nacionales e internacionales, reuniones secretas, o discretas, y se han fraguado grandes conspiraciones. La última, la protagonizada por Susana Díaz, Ximo Puig, García Page, Tomás Gómez, Guillermo Fernández Vara y otros dirigentes socialistas que en el Santo Mauro acordaron la táctica para desbancar a Pedro Sánchez aquel 1 de octubre.
Como buen santuario socialista, Rubalcaba lo utiliza frecuentemente para mantener todo tipo de contactos. Este jueves había quedado con un conocido periodista catalán. Estaban en su mano a mano cuando entró ufana Marta Pascal junto a Jordi Xuclá. El cronista los reconoció y les saludó. Les presentó a Rubalcaba. Se sentaron juntos y se pusieron manos a la obra. De lo que hablaron nada se sabe. Pero su encuentro da de qué hablar.