Carles Escolà, el alcalde de Cerdanyola del Vallès (Barcelona) ha decidido este miércoles recuperar la bandera española en la fachada del ayuntamiento de la ciudad. El edil de Compromís per Cerdanyola, una plataforma municipal donde está integrada la CUP, decidió descolgarla el domingo por la noche como muestra de rechazo a la actuación de la Policía Nacional y la Guardia Civil en el 1-O.
Lo hizo en el marco de un acto reivindicativo para las 17.120 personas (39,8%) que votaron en el referéndum. Escolà se subió a una tarima junto a los concejales soberanistas de la población, la mayoría en el pleno, y declaró que el “pueblo catalán” había iniciado el “camino hacia la república catalana”.
Puso el ayuntamiento a disposición de la Generalitat y descolgó la bandera española. En menos de 72 horas, vuelve a ondear.