Agosto ha sido un mes intenso para Jordi Turull. El dirigente convergente, ungido consejero de Presidencia de la Generalitat tras el plante de Neus Munté al presidente Carles Puigdemont, se ha dedicado este verano a recorrer el territorio, visitando numerosos municipios de la geografía catalana donde firma el libro de honor del ayuntamiento correspondiente. Pero la agenda institucional de Turull refleja que el verdadero motivo de la mayoría de esos viajes es asistir a las charlas que la Assemblea Nacional Catalana (ANC) imparte en esas localidades. Así, el hombre de confianza del expresidente Artur Mas se desplaza hoy jueves a Prades (Tarragona) con motivo de la conferencia que esta entidad, encargada de organizar las manifestaciones secesionistas de la Diada, pronunciará.
Ayer estuvo en Caldes de Malavella (Girona), donde la ANC también tenía previsto un acto. Y el pasado 10 de agosto, Turull viajó a Port de la Selva (Girona), también para participar en una charla de la Assemblea.