La alcaldesa de Vilanova i la Geltrú y presidenta de la Associació de Municipis per la Independència (AMI), Neus Lloveras (CDC), ha visto cómo Convergència i Unió (CiU) se ha roto en su municipio. De los seis regidores obtenidos en 2015, Lloveras se ha quedado con cuatro tras la renuncia de los dos ediles de Unió Democràtica de Catalunya (UDC), que han pasado a ser regidores no adscritos.
Lloveras gobierna en coalición con el PSC, que tiene cinco concejales. CiU, tras su ruptura, se queda sólo con cuatro. En la oposición están los cinco concejales de la CUP, cuatro de ERC, dos de Som Vilanova, uno del PP y otro de C's. Los dos regidores de Unió compartirán la condición de no adscritos con otra concejal que logró su acta en la lista de C's.
La líder de Unió en Vilanova es Ariadna Llorens, hermana de Marta Llorens, que fue la mano derecha de Josep Antoni Duran i Lleida en en el partido.
Ahora, la flamante presidenta de la AMI seguirá de alcaldesa porque el PSC mantendrá la gobernabilidad de la ciudad, pero las contradicciones de los nacionalistas han vuelto a quedar en evidencia.