Las preferentes, las hipotecas con condiciones abusivas o las cláusulas suelo han sido el germen de despachos de abogados que ofrecen sus servicios a los afectados, garantizando el éxito en altos porcentajes de casos. Nunca en España se habían visto y oído tantos anuncios de servicios jurídicos que se arrogan la representación de David contra Goliat.
El negocio es el negocio y tras estos grandes casos, los letrados buscan otros nichos de mercado y blanden como eslogan que solo cobran si el cliente cobra. Luego, cuando efectivamente hay ingresos, la cosa puede ser diferente. Estos despachos buscan ahora la seguridad aérea. Ayer miles de usuarios eran obsequiados con tarjetas de visita de un bufete al llegar a Barajas. Es la moda de la justicia aérea, los abogados aterrizan en los aeropuertos.