El exsecretario general de UGT, Cándido Méndez, dijo que no intervendría en la vida sindical tras su salida de la dirección del sindicato, y así ha sido. Desde que dejó la primera línea, ha acudido a pocos actos públicos y centra toda su actividad en Mensajeros de la Paz, la organización dirigida por su amigo el padre Ángel.
Sin embargo, puede hacer bueno el dicho de año nuevo, vida nueva, y asumir en 2017 la presidencia del Consejo Económico y Social (CES). El actual presidente, Marcos Peña, secretario general de Empleo en el último Gobierno de Felipe González, es un hombre de talante conciliador y de consenso, fue elegido en 2006 y ratificado en 2010. La falta de acuerdo entre las organizaciones presentes en el CES y el escaso interés del Gobierno para renovar la presidencia, han permitido a Peña mantenerse de forma interina al frente de este organismo independiente.
En estos días, algunas organizaciones integrantes del CES han vuelto a plantear la necesidad de renovar la presidencia. En un principio, la propia UGT ponía pegas a su nombramiento pero el tiempo lo cura todo y las relaciones entre Méndez y José María Álvarez, su sucesor, han mejorado tras el tumultuoso congreso ugetista. Con la venia de sus correligionarios, el camino de Méndez queda expedito porque tiene el apoyo de CCOO, CEOE y CEPYME.