La tensión es máxima en el PSOE. Tanta que los exsecretarios generales del partido socialista asistirán a la reunión del máximo órgano entre congresos. José Luis Rodríguez Zapatero y Alfredo Pérez Rubalcaba no acostumbran a ir al comité federal, como tampoco lo hace Felipe González, pero esta vez ambos lo harán y no esconden su posición crítica con Pedro Sánchez.
Zapatero ha suspendido un viaje a Caracas para asistir al cónclave que puede finiquitar el mandato de Sánchez. Sus críticas han sido muy duras desde que se rompió su alianza con Sánchez cuando éste le enmendó la plana criticando e impulsando una resolución en el Congreso contra la modificación del artículo 135 de la Constitución. El cambio que introdujo Zapatero en 2011, con el apoyo de Mariano Rajoy, situaba las deudas del Estado con las entidades financieras como primer compromiso, por delante de los sociales. Ese intento de marcha atrás de Sánchez fue definitivo. Ahí empezó todo.
Rubalcaba todavía se lo está pensando, pero dicen sus allegados que asistirá. El exvicepresidente del Gobierno se sumó a las críticas contra Sánchez hace dos semanas defendiendo en las redes sociales la libertad de expresión de Guillermo Fernández Vara, el líder extremeño, quien había criticado en público a su secretario general porque hacía dos meses que no hablaban. Su presencia puede ser fundamental para decantar algunos indecisos, sobre todo entre algunos miembros del Partido Socialista de Euskadi.