Mariano Rajoy ha hecho los deberes y ya tiene a Ana Pastor de presidenta en el Congreso. Ahora empieza lo realmente difícil para conseguir la mayoría en la investidura y formar Gobierno, aunque sea débil. Sin embargo, no parece que Ciudadanos y PSOE den su brazo a torcer. Es más, tanto unos como otros quieren que Rajoy sea derrotado en la primera investidura, que previsiblemente se votará el 5 de agosto. En ésta, solo conseguiría la abstención de Ciudadanos. El PSOE le seguirá negando la posibilidad de ser investido. 

En Moncloa, el gabinete de Rajoy ya trabaja con el escenario de una segunda investidura, probablemente para finales de agosto, y asume que sus rivales quieren ver cómo el presidente del PP muerde el polvo. Otra cosa es la segunda votación de esa investidura. En esta, Rajoy espera madurar un ‘sí’ de Ciudadanos y convencer al PSOE de que no ponga palos a las ruedas y evite la convocatoria de unas terceras elecciones.