Pedro Sánchez está siendo asediado por tierra, mar y aire. Ciudadanos se abstendrá, lo que pondrá a Mariano Rajoy en 169 contra 181 en una segunda votación de investidura. Sus barones dicen no a Rajoy, no a elecciones y PSOE a la oposición, lo que en sí mismo es un oxímoron porque la ecuación es imposible. 

El secretario general socialista sabe que tiene que tomar una decisión, pero abstenerse para permitir un Gobierno de Rajoy es un suicidio pensando en el próximo congreso del PSOE. La militancia socialista no está por la labor de hacer a Rajoy presidente, lo que le podría costar las primarias. Por eso, en Ferraz no se descarta la convocatoria de una consulta a los militantes para decidir entre Rajoy o nuevas elecciones. Una opción que está sobre la mesa y que pone de los nervios a los barones socialistas.