En CDC no se oyen voces discrepantes pero como las meigas "haberlas haylas". En la militancia se respira un cierto aroma de derrota electoral que pondrá más en cuestión --si eso es posible-- la continuidad de Artur Mas en la presidencia de la Generalitat. Muchos critican que sea Francesc Homs el cabeza de lista y otros que se mantenga la negociación con la CUP, que cada día que pasa se asemeja más a un calvario. Unos y otros se han llevado las manos a la cabeza cuando han visto el vídeo navideño de la candidatura que invita a romper las cenas de Navidad con la intención de salvar el país.
Este mundo crítico en el seno de CDC mantiene silencio. Sin embargo, todo apunta que un escenario de derrota el 20D abrirá la Caja de Pandora y voces críticas y autorizadas se harán oír. Entre sus demandas, no esperar a que la CUP sentencie a Mas y que el presidente tome decisiones. Unas decisiones que pasan por convocar elecciones y trabajar por salvar un partido desnortado y huérfano. En definitiva, en CDC se temen lo peor.