El Instituto de Seguridad Pública de Cataluña (ISPC), antigua escuela de policía, que depende de la Consejería de Interior, ha otorgado una distinción a un controvertido ex director de los Mossos d'Esquadra: Rafael Olmos, jefe de la policía autonómica durante el segundo tripartito –con Joan Saura como consejero–, y que fue cesado tras una polémica actuación policial en 2009, en una manifestación de estudiantes contra el plan Bolonia, que muchos calificaron de desproporcionada.
Olmos es una de las nueve personas que acaban de ser distinguidas por el Instituto de Seguridad Pública de Cataluña en reconocimiento a "especiales merecimientos, circunstancias singulares o servicios prestados" en el ámbito de "la formación, estudio e investigación científica" en seguridad.
La distinción, de carácter puramente honorífico y sin compensación económica, tiene también su plasmación física, en forma de una medalla, un pasador, un botón de solapa y un diploma.
En Interior desde 2004
Tras su cese al frente de los Mossos, Olmos, funcionario de carrera, siguió vinculado a Interior, como asesor en el propio ISPC. Tras la llegada de CiU al Govern en 2010, el entonces consejero del departamento Felip Puig lo mantuvo en el cargo, y en 2011 lo nombró "asesor en proyectos transversales". Para destituirlo al año siguiente, después de que la Oficina Antifraude de Cataluña investigara un supuesto trato de favor a Olmos en el concurso para una plaza de técnico en seguridad viaria.
No obstante este cese, en 2013 Olmos volvió a un alto cargo en Interior. Fue designado director de la Oficina del Plan de Seguridad Vial del Servei Català de Trànsit (SCT), un organismo que ya dirigió de 2004 a 2006. En julio de este año fue promovido a subdirector general de Seguridad Vial del propio SCT.