Lliçà d'Amunt termina noviembre con 695 personas sin trabajo

Un total de 40 personas han conseguido trabajo en el municipio en el último mes

El municipio de Lliçà d'Amunt ha terminado noviembre con una bajada en el número de desempleados hasta las 695 personas que actualmente se encuentran sin trabajo en la localidad, según el Instituto de Estadística de Cataluña (Idescat).

En total, son 40 personas menos en paro en comparación con el mes pasado, en una situación económica condicionada por la crisis de la pandemia de coronavirus. Estas cifras suponen una mejora con respecto al mes anterior, cuando el municipio terminó el periodo con 6.990 personas sin empleo.

El sector servicios es el más afectado por el desempleo

El sector servicios ha sido el más castigado en la localidad según los últimos datos publicados. El Departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias, señala que en Lliçà d'Amunt hay un total de 474 personas de esta actividad que no encuentran trabajo, lo que representa un 68,2% del total de desempleados. Por orden descendente, le siguen industria (21,01%), construcción (6,33%) y agricultura (0,14%).

La pandemia COVID-19 ha sido uno de los mayores motivos que ha afectado tasa de paro en Lliçà d'Amunt, pero hoy en día no es el único. Todas las medidas de contención y aforo que se llevaron a cabo afectaron considerablemente a los ingresos de parte del sector servicios, dejando a gran parte de los establecimientos en una situación comprometida.

El paro en España ha sido y es uno de los grandes escenarios pendientes de la población y el gobierno en los últimos años y la situación no ha ido a mejor debido al contexto actual. La guerra de Ucrania ha dañado a la economía global y España no ha sido la excepción. La incertidumbre política y económica en Europa ha hecho descender negativamente el crecimiento económico y, por lo tanto, el empleo.

Además, la pandemia del coronavirus también tuvo un impacto significativo en la economía de España, ya que muchas empresas tuvieron que cerrar o reducir sus actividades. Esto provocó un descenso de ofertas de empleo y un ascenso en la tasa de desempleo. Si bien se han impulsado ayudas y apoyo financiero para las empresas, la recuperación de la economía todavía no ha llegado a su punto máximo.

Por último, la inflación es un elemento extra que también ha afectado al empleo en España. La continuada subida de los precios de los alimentos, la energía, los combustibles y otros productos de necesidad ha causado una disminución en el poder adquisitivo de la población. Esto ha llevado a una bajada en el consumo y una caída en las ventas de muchas empresas, lo que a su vez impacta en el empleo.

El gobierno ha intentado tratar este problema en España mediante políticas y medidas para garantizar el crecimiento económico y la creación de nuevos puestos de trabajo. Entre estas medidas se incluyen la reducción de trámites para la creación de empresas, la reducción de impuestos para las pymes, la formación de trabajadores y la promoción del emprendimiento.

A pesar de estas medidas, la tasa de paro en España sigue siendo preocupante. La situación actual es incierta y es difícil predecir cuándo se producirá una estabilidad en la economía española y la reducción del paro.

Mujeres entre 60 y 64 años

Apenas existe desigualdad de género entre hombres y mujeres en situación de desempleo en Lliçà d'Amunt, aunque las cifras son ligeramente más altas en el caso de las mujeres (416 personas) que en los hombres (279 parados).

Por grupos de edad, el más golpeado por el paro es el de adultos entre 60 y 64 años, con 129 personas actualmente desempleadas.