Una foto de Luis Suárez celebrando su gol ante el Liverpool / EFE

Una foto de Luis Suárez celebrando su gol ante el Liverpool / EFE

Primer equipo

Luis Suárez pidió perdón a la afición del Liverpool tras celebrar el gol

El uruguayo abrió la lata ante el Liverpool y tras celebrarlo con euforia se dirigió a la afición inglesa con un gesto de compasión

2 mayo, 2019 17:14

Luis Suárez tenía una cita con la historia y con unas estadísticas preocupantes en Champions en el mejor escenario posible. El Camp Nou, ante su exequipo, el Liverpool y con una final a tocar. Y no defraudó. El uruguayo fue el encargado de abrir el marcador en el minuto 26 de encuentro a pase de Jordi Alba cuando el Barça más lo necesitaba. 

Suárez en una acción del partido del Liverpool / EFE

Suárez en una acción del partido del Liverpool / EFE

Suárez en una acción del partido del Liverpool / EFE

 

Un gol que fue una bombona de oxígeno para un equipo que apenas había pisado campo contrario y que tenía serios problemas para salir con el balón jugado. Señaló el espacio al lateral y fusiló desde el suelo a Alisson con un remate impredecible. Un tanto que enfrío al Liverpool hasta la segunda mitad. 

Agradecido, pero sin compasión

No se podía prever su reacción al gol, pero Suárez celebró con euforia su primer gol esta temporada en Europa. Se olvidó de su exequipo, corrió detrás la portería y tras besarse los dedos y la mano se deslizó en el verde a la espera del abrazo de sus compañeros. Muchos minutos y muchos meses sin marcar en competición europea pudieron con el respeto que le procesa al club que le catapultó a la élite mundial. 

Sorprendió, pero lo advirtió en la previa en una entrevista para los medios del club catalán: "Es agradable destacar lo agradecido que estoy con el Liverpool por todo lo que me dieron, pero ya sabes, una vez esté en el campo no habrá amistades, ni compañeros, ni pensamientos para todos los buenos momentos que pasé. Defenderé los colores de Barcelona con todo el orgullo del mundo".

El detalle

Cumplió con su palabra. Y es que el Pistolero fue un auténtico dolor de cabeza para la defensa y para todo un equipo. Protestó, reclamó y desquicio a sus marcas con juego y con palabras. Vamos, al más puro estilo Suárez. Eso sí, apartó los buenos recuerdos, pero no se olvidó de ellos. Tras marcar y celebrarlo con sus compañeros, una vez solo de vuelta a su campo, se dirigió a la grada donde se encontraban los aficionados ingleses y mirándoles junto las manos en señal de perdón por lo dado. 

Suárez es leyenda en Barcelona y también el Liverpool y este miércoles la agrandó un poquito más.