Luis Suárez en la Supercopa / EFE

Luis Suárez en la Supercopa / EFE

Primer equipo

Las alternativas que maneja el Barça para suplir a Luis Suárez

El delantero uruguayo estará apartado de los terrenos de juego entre cuatro y seis semanas

11 enero, 2020 22:02

El FC Barcelona ha recibido este sábado una de las peores noticias posibles. Luis Suárez, que pasaba por un momento dulce de cara a puerta, deberá pasar por quirófano para solucionar las problemas que sufre en el menisco de su rodilla derecha. Será operado este domingo por el doctor Ramón Cugat. Tras la intervención, el club emitirá un nuevo parte médico.

Si bien la entidad azulgrana no ha detallado el tiempo de baja, es de prever que esté entre cuatro y seis semanas apartado de los terrenos de juego. O lo que es lo mismo, podría perderse entre siete y once partidos. Entre cuatro y seis de Liga, así como dieciseisavos, octavos, cuartos y quizás la ida de semifinales de Copa del Rey. El principal objetivo es que esté recuperado de cara al primer partido contra el Nápoles (25 de febrero).

Así pues, el FC Barcelona se queda momentáneamente sin el único delantero centro de la plantilla. Valverde o quien sea que dirija el equipo a partir del lunes deberá buscar y probar diferentes alternativas para tratar de evitar que la ausencia de Luis Suárez se note en exceso. A continuación, las posibles soluciones con las que cuenta el conjunto catalán.

Falso 9

Uno de los aspectos más importantes es dilucidar quién debe ocupar la punta de ataque. Para tal posición, los azulgranas cuentan con dos alternativas de lujo: Antoine Griezmann y Leo Messi. Tienen unas características muy diferentes a las del charrúa, tanto físicas como técnicas, por lo que adoptarían un rol de falso nueve.

Griezmann con Leo Messi en un partido con el Barça / FC Barcelona

Griezmann con Leo Messi en un partido con el Barça / FC Barcelona

Griezmann abrazándose con Leo Messi ante el Dortmund / FC Barcelona

Han ocupado la izquierda y la derecha a lo largo del curso, pero son dos futbolistas con mucho gol que bien pueden jugar por el carril central. El galo estaba acostumbrado a hacerlo en el Atlético de Madrid, aunque con un ariete fijo como Morata o Diego Costa por delante, mientras que el 10 ocupó esa posición a principios de la década.

Canterano

En caso de que el FC Barcelona siga apostando por un 4-3-3, que parece lo más fiable, hará falta un tercer delantero aparte del francés y el argentino. Con Dembelé lesionado, las puertas de la titularidad se abren para dos canteranos que están enrolados en dinámica del primer equipo: Carles Pérez y Ansu Fati. Cuajaron un buen arranque de temporada y cada vez que saltan al verde aportan velocidad, frescura y desequilibrio.

Ansu Fati y Carles Pérez/ Twitter

Ansu Fati y Carles Pérez/ Twitter

Ansu Fati y Carles Pérez, los goleadores del Barça ante el Inter/ Twitter

El de Granollers se siente más cómodo en el perfil derecho del ataque, por lo que podría ser la primera opción si Messi cayera al centro y Griezmann siguiera en la izquierda. El hispano-bisauguineano, por su parte, suele ocupar el flanco izquierdo. Por lo tanto, podría entrar si Griezmann pasara a ocupar la posición de nueve o si cambiara de lado.

Dicho de una forma más esquemática, si el sistema sigue siendo el 4-3-3 habría tres posibilidades: Griezmann en la izquierda, Messi en el centro y Carles en la derecha; Ansu Fati en la izquierda, Messi en el centro y Griezmann en la derecha; o Ansu en la izquierda, Griezmann en el centro y Messi en la derecha.

4-4-2

Por último, no se puede descartar un cambio de sistema y que el Barça pase a jugar con cuatro centrocampistas. Una vez Frenkie de Jong cumpla sanción y Arthur se recupere, los azulgranas contarán con cinco medios de garantías siempre y cuando Arturo Vidal no se vaya. A ellos habría que sumar a Sergi Roberto, ahora en el lateral derecho, y a Riqui Puig, que podría ganar protagonismo de aquí a final de curso.

Arturo Vidal e Ivan Rakitic en un partido del Barça / EFE

Arturo Vidal e Ivan Rakitic en un partido del Barça / EFE

Arturo Vidal e Ivan Rakitic en un partido del Barça / EFE

 

Sería una idea bastante más conservadora y con poca capacidad de desborde por banda, más allá de la que puedan ofrecer los laterales. Pero ante este cúmulo de bajas en ataque, es tan opción como el 4-3-3.