Tarjeta roja: Kevin Punter

Kevin Punter ha vuelto a salir en la foto de la derrota del Barça de basket. Esta vez, el Estrella Roja ha asaltado el Palau Blaugrana (74-78) en un desenlace ajustado, pero igualmente fatídico, que para muchos culés será un déjà vu. La jugada de la discordia, con el protagonismo no deseado del escolta del Bronx, que ha perdido solo la pelota cuando el equipo azulgrana tenía tres puntos de desventaja en la última posesión. Un error mayúsculo que vale una derrota, de nuevo.

En términos anotadores, el crack estadounidense no ha cuajado un partido desastroso, con 13 puntos, aunque 2/8 en tiros de dos y 4 puntos de valoración. Sin embargo, la acción en cuestión ha tirado el partido por la borda en segundos. Por todos es sabida la calidad individual de Punter en el uno contra uno para inventarse canastas inverosímiles de corta, media y larga distancia. Con esto, destaca más como tirador que director de juego.

Punto debil

Las labores de dirección del juego no son precisamente el punto fuerte del escolta nacionalizado serbio. Más bien, lo contrario. En el tropiezo frente a la Virtus de Bolonia (86-81) una presión de dos rivales provocó el robo y, por lo tanto, la pérdida de balón de Punter en el último suspiro que enterró las opciones de llevarse el partido de Italia. Capaz de lo mejor, y de lo peor.

Tampoco fue aquella la primera ocasión en la que Kevin evidenció sus flaquezas en momentos de máxima tensión. En la derrota a manos del Panathinaikos en Atenas (90-89), otra defensa intensa de dos jugadores rivales degeneró en el robo de balón que tumbó al cuadro catalán. El afán de la nueva estrella azulgrana de realizar una jugada personal le pasa factura en momentos que tendría que dejar las conducciones para un base puro y centrarse en el lanzamiento. En este caso, la baja de Nico Laprovittola pesa como una losa.