El Barça de basket finiquitó el pasado 30 de junio un ciclo, liderado por Sarunas Jasikevicius, Nikla Mirotic y Cory Higgins. Joan Laporta pasó la tijera por una sección muy deficitaria que esta temporada ha recortado su presupuesto en unos 12 millones de euros. En verano también se marcharon Sanli, Kuric y Tobey, y llegaron Joel Parra, Darío Brizuela, Willy Hernangómez y Jabari Parker, los dos últimos con mucha experiencia en la NBA. Fue una revolución mayúscula, liderada por el inexperto Roger Grimau, que tendrá continuidad dentro de unos meses.
Juan Carlos Navarro, manager general, prepara más cambios. Jokubaitis y Nnaji podrían dar el salto a la NBA y el club no renovará los contratos de Oriol Paulí y Da Silva. También acaba su relación con el club Kalinic, una pieza muy importante para Grimau con ofertas de otros equipos. Incierto también es el futuro de Parker, cada vez más entonado.
Las carencias del Barça
La sección de basket espera que el presupuesto de la próxima temporada no encoja otra vez. Al contrario. Y el Barça trabaja en el fichaje de un escolta de primer nivel y, sobre todo, de un ala-pívot. En la posición de base podría subir al primer equipo Kasparas Jakucionis.
Navarro tiene identificadas las necesidades del Barça. Sus principales carencias. Al equipo le faltan jugadores con carácter y el manager general podría intentar, otra vez, el fichaje de Juancho Hernangómez.
El representante de Juancho y Mirotic
El hermano de Willy ya estuvo en la agenda del Barça el pasado verano. El problema fue que su representante, Igor Crespo, no quiso escuchar la oferta del club azulgrana. El motivo, estaba enojado por la rescisión unilateral del contrato de otro jugador que representa: Mirotic.
Juancho fichó por el Panathinaikos, pero el club ateniense y el mismo jugador podrían rescindir su contrato amistosamente. El ala-pívot está, actualmente, lesionado y el Barça sabe que Florentino Pérez también suspira por su fichaje por el Real Madrid.
Un escolta tirador
Navarro también busca un escolta tirador. Un jugador fiable que pueda asumir el liderazgo del equipo. El pasado verano quiso fichar a Kevin Punter, pero el escolta estadounidense renovó finalmente su contrato con el Partizán tras flirtear con el Barça.
Laporta quiere que el Barça vuelva a ser competitivo. La actual temporada ha empezado con muchas dudas y con Grimau, cuestionado. En el Palau gusta su propuesta ofensiva, pero no la escasa intensidad defensiva de un equipo en construcción.