Sarunas Jasikevicius acabó la pasada temporada con malas sensaciones. Antes incluso de que se disputara la final de la Liga Endesa, el técnico lituano pidió cinco bajas a la dirección deportiva y sabía que Brandon Davies no renovaría su contrato. También se marcharon Hayes-Davis, Smits, Dante Exum, Calathes y Oriola. Los dos últimos, tras largas y tensas negociaciones para rescidir su contrato.

 

Hayes-Davis solo jugó un año en el Barça. Sus números fueron muy discretos. Mejor defensor que atacante, tenía asumido que no renovaría con el Barça. Smits, tras cuatro años en el Palau, también tenía claro que no entraba en los planes de futuro de Jasikevicius y aceptó su salida. Igual que Exum, a quien el técnico quería, pero optó por fichar por el Partizán.

Davies, rumbo a Milán

El primer problema que tuvo que gestionar Jasikevicius fue el de Davies. En plena temporada, el Barça le hizo dos ofertas a la baja que rechazó el pívot estadoundense. Antes de que acabara el curso, Davies ya se había comprometido con el Milán. Y su rendimiento en el tramo final de la Liga fue decepcionante, para malestar del técnico azulgrana.

Oscar Da Silva pugna con Davies en un partido entre el Alba y el Barça / REDES

Oscar Da Silva pugna con Davies en un partido entre el Alba y el Barça / REDES

Más sonados fueron los despidos de Calathes y Oriola. Ambos fueron descartados por Jasikevicius por motivos diferentes. Y ambos se han marchado muy molestos con el técnico.

Calathes y Satoransky

Jasikevicius y Calathes chocaron varias veces durante la pasada temporada. Y el técnico prefería un base más dinámico que el griego, un gran director de juego pero con un lanzamiento exterior muy discreto y partidario de un juego mucho más pausado. Satoransky fue la apuesta del entrenador lituano. Una foto de ambos en un restaurante agravó el malestar de Calathes, quien pedía el cobro íntegro de su salario hasta 2023 para rescindir su contrato. Al final hubo acuerdo entre las dos partes y el jugador fichó por el Fenerbahce.

Nick Calathes, marcando a Sergio Llul, durante el Barça-Madrid de la Final Four / EFE

Nick Calathes, marcando a Sergio Llul, durante el Barça-Madrid de la Final Four / EFE

Oriola también ha salido del Barça forzado por las circunstancias. El capitán nunca fue del agrado de Jasikevicus, partidario de pívots más polivalentes, con buen lanzamiento y versátiles. 

El pívot de Tàrrega se despidió el jueves de sus compañeros y de la afición del Barça, y recalcó que su salida se debía a una decisión unilateral de Jasikevicius.