El Barça de basket progresa adecuadamente. El equipo de Sarunas Jasikevicius, que comenzó el curso con seis altas y otras tantas bajas tras el decepcionante final de la temporada pasada, ganó la Lliga Catalana tras imponerse al Joventut por 82-92.
Nikola Mirotic, la gran estrella del Barça, el jugador que ganarça unos 10,5 millones de euros brutos esta temporada, sigue lesionado y todavía no está clara la fecha de su reaparición. Sin él, el equipo azulgrana es menos letal, pero es más físico y aguerrido que el del ejercicio pasado.
Carácter y buena mano
En la final de la Lliga, Kalinic, autor de 17 puntos, evidenció que será un jugador básico para Jasikevicius. Puede jugar de alero y ala-pívot. Tiene carácter y buena mano. Y no se esconde en los momentos más delicados.
Laprovittola, con 12 puntos, también fue una pieza clave del Barça para imponerse a un Joventut que comenzó muy fuerte y que tuvo en Ellenson (16 puntos) a su jugador más acertado.
Barça más físico
En el descanso, el Barça ya ganaba por 37-41. Abrines (12), Sanli (12) y Kuric (11) también estuvieron acertados en ataque, mientras que Higgins está lejos de su mejor versión.
El nuevo proyecto de Jasikevicius ilusiona. El técnico lituano quiere un Barça más físico, más duro en defensa y versátil. A la espera de que vuelva Mirotic, Kalinic es quien asume los galones en ataque.