El Barça femenino venció con autoridad al Glasgow City en el primer partido de la eliminatoria de octavos de final de la Champions League femenina. Tras ganar el domingo al Rayo Vallecano por 9 a 1 en casa, las azulgrana se vistió de gala para dar un golpe sobre la mesa en la competición europea ante el campeón de la liga escocesa.
El partido fue un monólogo azulgrana que, parece ser, aprendieron la lección tras el tropiezo en los dieciseisavos. Perdieron en Kazahistán 3 a 1 y se vieron obligadas a remontar en el Mini. La puesta en escena del Barça no podía o ser mejor. Tan solo una llegada de las escocesas, en el minuto tres, en toda la primera parte. Desde entonces, el Barça se hizo dueño y señor del balón y buscó constantemente la portería defendida por Alexander.
No tardó mucho en hacer efecto el dominio azulgrana y tras un centro lateral, la centrocampista Kheira Hamraoui ha recogido un rechace que tras un recorte ha mandado al fondo de la red. Con el marcador a favor, el Barça respiró más tranquilo. Con Vicky Losada en la sala de máquinas --un día más en la oficina para la de Terrassa-- el equipo de Fran Sánchez ha buscado las bandas y los pases interiores para desestabilizar la defensa escocesa.
Sánchez alineó a un equipo inesperado, pero no notó las bajas de Leike Martens --de última hora por molestias en el pie izquierdo-- o de Toni Duggan. Con paciencia, las azulgrana maduraron el partido y Aitana Bonmatí marcó el segundo en el 37 tras un buen centro de Andressa Alves. Patri Guijarro, sentenció el partido en el 40 tras recoger otro rechace dentro del área.
Con el partido finiquitado y las escocesas sin poder imponer resistencia a las acometidas azulgrana, Fran Sánchez movió el banquillo para dar descanso a algunas jugadores e intentar ampliar el marcador. Alexia y Toni Duggan entraron en la segunda parte para marear, todavía más, al equipo de S. Booth.
En el 67 y en una de las jugadas más verticales del Barça, Andressa Alves firmó su premio particular a un gran partido con un chut lejano que la cancerbera Alexander erró.
Con el 4 a 0 a favor y casi la eliminatoria finalizada, el Barça aflojó y permitió a las visitantes tocar más balón, pero el único peligro fue en un córner que se marchó fuera por muy poco. Minuto más tarde, en el 80, y en el séptimo saque de esquina del Barça, Mapi León recogió un rebote defensivo y mandó el esférico al fondo de la red tras un zurdazo desde fuera del área.
Manita azulgrana y eliminatoria finiquitada. El jueves 1 de noviembre se jugará la vuelta donde el Barça podrá jugar con la ventaja del marcador a favor y, a excepción de hecatombe, deberá esperar para conocer su rival de cuartos de final.