El Camp Nou y el Santiago Bernabéu, cara a cara en un fotomontaje CULEMANÍA
El Bernabéu, un estadio más pijo, ruidoso y elitista que el nuevo Camp Nou
El Real Madrid contó con el apoyo de una afición que llenó un estadio con gran sonoridad por su cubierta total
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El Bernabéu siempre es un estadio hostil para el Barça, como lo es el Camp Nou para el Real Madrid. El clásico del domingo fue, tal vez, más movido de lo habitual, tras asegurar Lamine Yamal que el club blanco recibe siempre un trato de favor de los árbitros. También había ganas de revancha, o venganza, en la afición madridista, tras las cuatro victorias del equipo azulgrana en los cuatro duelos de la temporada pasada.
El Madrid-Barça fue un partido caliente, con muchas decisiones arbitrales al límite, polémicas. La tarde, agitada siempre, acabó con tangana y algo más que palabras entre los futbolistas desde que Carvajal se encaró con Lamine.
Una olla a presión
El Bernabéu, con más de 83.000 aficionados en las gradas, fue una olla a presión. La sonoridad intimida al rival cuando el estadio está totalmente cubierto. También es un campo mucho más vertical que el Camp Nou, más abierto.
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En 2000, el Bernabéu era un estadio obsoleto, incómodo, y Florentino Pérez inició su transformación tras ganar las elecciones y fichar a Luis Figo. Hasta 2018, el Real Madrid invirtió unos 180 millones de euros en reformas, mientras que las obras en el Camp Nou se limitaban a chapa y pintura. Y poco más.
Inaugurado en 1947
Florentino renovó el Bernabéu, estadio inaugurado en 1947 (10 años antes que el Camp Nou) que modernizó sus dependencias y cubrió todas las localidades. También construyó 5.000 asientos Vip y el club presumía de que en su palco se cerraban muchos negocios y se tomaban decisiones políticas de gran calado.
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Florentino, sin embargo, abordó la gran reforma del Bernabéu en 2019. El estadio apenas ganaba 2.000 asientos, pero se convertiría en el primero de España con un techo y un césped retráctiles, aptos para acoger otras disciplinas deportivas y grandes eventos. También tiene un vídeomarcador de 360 grados que no tendrá el Camp Nou.
Los conciertos del Bernabéu
El presidente del Real Madrid quería multiplicar los ingresos anuales por la explotación del Bernabéu, reformado para acoger conciertos de grandes estrellas nacionales e internacionales. Su plan, sin embargo, encalló tras las protestas de los vecinos, por la excesiva sonoridad del estadio.
Tangana en el clásico Real Madrid-Barça EFE
El Real Madrid, hoy, busca soluciones para insonorizar el Bernabéu, mucho más pijo, elitista y ruidoso que el nuevo Camp Nou, el estadio del Barça que todavía está en obras.
El Camp Nou, con más aforo
El futuro Camp Nou tendrá 104.600 asientos. Todas las localidades estarán cubiertas, pero no el terreno de juego. "Será un estadio mucho más abierto y mediterráneo", sostiene Joan Laporta, presidente del Barça.
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Laporta estima que el Barça ingresará 400 millones de euros por la explotación del Camp Nou cuando terminen las obras. A partir de 2027 será un estadio "mucho más cómodo y sostenible", con más zonas verdes, 69 ascensores, 78 escaleras mecánicas y 3.000 plazas de aparcamiento.
Las grandes diferencias
El Real Madrid también aspira a ingresar 400 millones de euros anuales por el Bernabéu, que cuenta desde hace años con una importante oferta de restauración. Su museo, sin embargo, tiene menos visitantes que el del Barça, mucho más necesitado económicamente que su gran rival para salir del túnel en el que sigue inmerso.
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El nuevo Camp Nou tendrá 9.600 palcos, unos 4.000 más que el Bernabéu, y un boulevard entre la primera y la segunda grada. Con menos eco que el Bernabéu, también suele ser un estadio muy caliente cuando el Barça juega contra el Real Madrid. El recibimiento que tuvo Lamine Yamal fue una broma comparado con el clima adverso que se encontró Luis Figo cuando regresó al Camp Nou como jugador madridista.