Un mes de baja: el fichaje maldito del Real Madrid que no levanta cabeza

No hay manera. Desde que dio calabazas al FC Barcelona para fichar por el Real Madrid, parece que Arda Guler está maldito. Quien aterrizase en el conjunto merengue con la vitola de futuro crack, de momento no ha podido debutar en partido oficial y encadena lesión tras lesión.

Un nuevo debut frustrado

Parecía que ya estaba recuperado de la lesión que sufrió durante la pretemporada y, de hecho, Ancelotti anunció que iba a estar en la convocatoria ante Las Palmas. Sin embargo, finalmente no será así. El joven centrocampista turco sufrió unas molestias en la recta final del entrenamiento de este martes y, tras ser examinado por los médicos, el Real Madrid emitió un comunicado.

"Tras las pruebas realizadas a nuestro jugador Arda Guler por los Servicios Médicos del Real Madrid, se le ha diagnosticado una lesión en el músculo recto anterior izquierdo. Pendiente de evolución", decía el parte médico del club blanco.

Arda Guler podría permanecer cuatro semanas extra de baja por esta nueva dolencia, que va a retrasar su estreno como jugador del Real Madrid en Liga. Y que, como es lógico, impacienta cada vez más a los aficionados del Real Madrid.

El apretón de manos entre Arda Güler y Florentino Pérez RM

La mala pata de Arda Guler

Fue el 14 de agosto cuando el club informó sobre una lesión en la zona del menisco interno de su rodilla derecha, que requirió de una intervención quirúrgica mediante artroscopia. Aunque el proceso de recuperación parecía ir bien, la nueva lesión en el recto anterior izquierdo enciende las alarmas.

A sus 19 años, había causado muy buenas sensaciones en las primeras jornadas de entrenamiento durante la pretemporada. Su habilidad y potencial habían generado expectativas entre la afición merengue, pero las lesiones recurrentes están poniendo en duda su capacidad para mantenerse en plena forma, y para contribuir con su juego en los próximos partidos del equipo. Con otras lesiones como las de Vinicius, Courtois, Carvajal o Militao, Ancelotti no da para más digustos.