El Real Madrid está abonando el terreno para anunciar su primer bombazo del mercado de verano. La directiva de Florentino Pérez tiene entre manos el fichaje de Jude Bellingham, que representaría todo un golpe sobre la mesa. Su posible llegada, que daría un nuevo aire a la mitad de cancha, también podría suponer un problema para el FC Barcelona. Concretamente con un objetivo que desea Xavi Hernández.
Bellingham es uno de los jugadores más cotizados del mercado. No solo el Madrid ha estado detrás de su fichaje, sino también entidades de peso como el Manchester City. Justamente en las oficinas del equipo citizen dan por perdido la incorporación del joven centrocampista, lo que implica que deberán considerar otras alternativas para no perjudicar la composición de la plantilla. Una de las opciones es tratar de retener como sea posible a Ilkay Gundogan, uno de los grandes anhelos del Barça.
La no llegada de Bellingham a la ciudad de Manchester podría truncar los planes de la directiva de Laporta con Gundogan. El jugador alemán es el principal objetivo del club azulgrana para reforzar la mitad de cancha, especialmente porque termina contrato en verano. Desde hace tiempo que la dirigencia citizen ha tratado de ampliar su presencia en el equipo de Pep Guardiola, pero ahora tratarían de lanzar una nueva ofensiva ante el escenario de no encontrar a un reemplazo en condiciones.
El deseo de Gundogan
Si bien es cierto que la posibilidad de un nuevo acercamiento del City a Gundogan puede ser un factor clave, la realidad es que el experimentado centrocampista quiere jugar en el FC Barcelona. Se trata de un deseo total, por lo que los contactos de su entorno con la cúpula azulgrana se han dado desde hace varias semanas. Todavía no hay un acuerdo firmado, pero las condiciones están prácticamente pactadas.
En el Barça esperan a que termine la temporada para dar ese último paso en el fichaje de Gundogan. La directiva ha trazado un plan de viabilidad que permita inscribir a los nuevos futbolistas, entre los que se encuentra el alemán. Es un trabajo complicado, teniendo en cuenta los recortes en los gastos salariales, pero existe confianza dentro del club para lograr dicho objetivo. De ello depende para que Xavi Hernández tenga a esos refuerzos de cara a la siguiente temporada.