La permisividad con Vinicius en España contrasta con el arbitraje europeo

Vinicius Jr será un crack con el balón en los pies, pero cada vez despierta más polémicas extradeportivas. Fue el protagonista de la final de Copa del Rey no sólo por generar las acciones de ambos goles de Rodrygo, sino también por sus continuos gestos y provocaciones hacia los jugadores rivales e, incluso, un sector de la afición de Osasuna. Ya justo antes de dar comienzo el partido, decidió no saludar a los colegiados junto al resto de sus compañeros.

Durante el transcurso del encuentro ante el cuadro rojillo, se frotó el escudo del Real Madrid mirando de manera desafiante a la grada ocupada por los seguidores del conjunto contrario. A continuación, reflejó con sus manos el 1-0 favorable al Real Madrid que entonces brillaba en el marcador, en otro gesto dirigido a los aficionados navarros.

La mala actitud de Vinicius en el campo

También celebró el segundo tanto del Real Madrid riéndose justo enfrente de Lucas Torró, el jugador que había marcado minutos antes el 1-1 para Osasuna. Y al descanso, casi provocó un incidente serio entre jugadores de uno y otro equipo al descanso al picarse con el Chimy Ávila, de camino al túnel de vestuarios: la rápida actuación de algunos de sus compañeros, como Lucas Vázquez, lo impidió.

Está claro que Vinicius Jr andaba caliente por los insultos recibidos de parte de los aficionados rojillos. Eso, sin embargo, no justifica que sus reacciones infantiles sigan sin desaparecer. El hecho de ser alguien tan temperamental impide, por ahora, que pueda corregir sus actitudes antideportivas. Lo peor de todo es que no se le sanciona por ello, más allá de algunas amarillas recibidas en los últimos compromisos por protestar directamente en la cara del árbitro. En el resto de ligas europeas sí suelen ser más tajantes ante las desconsideraciones de los futbolistas.

Vinicius Jr y David García se las tienen en la final de Copa del Rey / REDES

Vinicius Jr y David García se las tienen en la final de Copa del Rey / REDES

En Europa las cosas funcionan diferente

Sin ir más lejos, este mismo domingo el delantero serbio de la Juventus, Dusan Vlahovic, fue amonestado por el colegiado del Atalanta-Juventus por un gesto parecido a los que suele hacer Vini con total impunidad. Vlahovic marcó el 0-2 definitivo de la Juventus en el último minuto del tiempo añadido, y lo celebró dirigiéndose a un sector de la grada que le había dedicado cánticos racistas minutos antes, llevándose las manos detrás de las orejas. 

Pese a los cánticos anteriores, el trencilla consideró que el gesto del delantero servio era antideportivo, y le mostró la tarjeta amarilla por ello. El artículo 118.d del citado Código Disciplinario es muy claro con estas situaciones, en relación a uno de los motivos que pueden conllevar amonestaciones: “Cometer actos de desconsideración con directivos, técnicos, espectadores u otros jugadores”.

Algo que el futbolista brasileño del Real Madrid está tomando por costumbre en España, mientras que en Champions League se muestra más comedido. Quizá es porque sabe que, en Europa, las cosas funcionan diferente. Y que este martes, contra el Manchester City, estará obligado a contenerse algo más de lo que lo hace normalmente.