Éder Militao empezó con el pie izquierdo en el Real Madrid. Se mareó en su rueda de prensa de presentación, protagonizando una de las puestas de largo más surrealistas que se recuerdan en los últimos años. Y, durante su primera temporada en el Real Madrid, no fue capaz de jugar con regularidad por culpa de la presencia en la plantilla de Sergio Ramos.
El peso de los 50 millones de euros pagados al Oporto, la adaptación complicada y el valor que había tenido durante una década la pareja Ramos-Varane provocaron que el brasileño tardase en ganarse la confianza de los madridistas. Por si fuera poco, sus primeras actuaciones tampoco fueron deslumbrantes, y se le llegó a comparar desde algunos sectores con fiascos como Samuel o Woodgate.
Militao hace olvidar a Sergio Ramos
Nada más lejos de la realidad. Desde que Sergio Ramos abandonó el club merengue, la eclosión del defensor de 25 años ha sido exponencial. Se ha instalado en el podio de los tres mejores centrales del mundo, y está siendo una pieza clave en los últimos éxitos del Real Madrid. Ha sido de los jugadores que más han crecido bajo el mando de Carlo Ancelotti, y actualmente se trata de un jugador fundamental en el Real Madrid y en Brasil. Ya nadie duda de él.
El hecho de que esté sancionado y vaya a perderse la ida de semifinales de la Champions League, contra el Manchester City, genera pavor en el madridismo. Tampoco está claro que Alaba vaya a estar físicamente al cien por cien para formar pareja con Antonio Rüdiger en el centro de la zaga.
La aportación goleadora de Militao
Sea como sea, el Real Madrid no sólo echará de menos a Militao en la retaguardia, sino también su aportación ofensiva. Con el gol que marcó al Celta hace unas semanas, su cuenta de tantos se eleva esta temporada a siete goles: Celta, Espanyol, Liverpool, Villarreal, Cádiz, Rayo Vallecano y Getafe.
Una cifra nada desdeñable, teniendo en cuenta que desde que Sergio Ramos fichó por el Real Madrid --verano de 2005--, solo él había sido capaz de alcanzar esa altura goleadora siendo defensa. Con 13 dianas como techo goleador en un curso, Ramos acabó cinco de sus 16 temporadas en el Real Madrid con al menos siete goles en su cuenta particular.