El Real Madrid recurre nuevamente a las remontadas para sobrevivir a otra noche de Copa del Rey, tal y como hicieron la semana pasada ante el Villarreal. El elenco merengue logró revertir un partido complicado (3-1) contra el Atlético de Madrid, correspondiente a los cuartos de final. A pesar de haber encajado un gol tempranero de Morata, los dirigidos por Ancelotti pudieron forzar el encuentro hasta la prórroga y ganarlo con los tantos de Benzema y Vinicius. Dicho triunfo les posiciona en las semifinales, junto al Athletic Club, CA Osasuna y FC Barcelona, que aspira a hacerse con el título de la competición.
Morata y la ley del ex
Los colchoneros dieron el primer golpe en el comienzo del enfrentamiento con el gol de Álvaro Morata. El exdelantero del Real Madrid remató con excesiva facilidad un pase desde el sector derecho de Nahuel Molina, siendo otra jugada en la que la defensa merengue demuestra su fragilidad. Dicha anotación hizo justicia a ese tramo del partido, debido a que el elenco rojiblanco estaba encontrando a sus futbolistas más talentosos en zonas de mucho peligro.
El Real Madrid muestra un claro problema en el control de los partidos. Cada vez es más fácil llegar hasta la portería defendida por Courtois. El bajo rendimiento de piezas como Mendy o Rudiger está representado un enorme dolor de cabeza para Ancelotti, que debe afrontar un par de meses de máxima exigencia por el calendario tan cargado de partidos.
El Madrid sigue vivo en la Copa
Pero como suele ser costumbre desde la temporada anterior, el elenco madrileño ha vuelto a tirar de su talento para superar una situación complicada. Primero con el golazo de Rodrygo Goes, tras una jugada maravillosa por el carril central. El brasileño fue fundamental para que los suyos pudieran forzar la prórroga, debido a las enormes dificultades que estaban teniendo para superar la resistencia de Oblak.
Ya en el tiempo extra, los dirigidos por Ancelotti siguieron inclinando la cancha con las diferentes jugadas de sus atacantes. El contexto fue mucho más favorable a partir de la expulsión de Savic por doble amarilla, siendo una situación con cierta polémica, porque el árbitro también debió aplicar esa misma rigurosidad con Dani Ceballos por sus evidentes faltas. Esa superioridad numérica fue el golpe definitivo para el Atlético de Madrid en los cuartos de final.
Los autores de los tantos de la victoria fueron cortesía de Benzema y Vinicius, quienes lograron plasmar su nombre en el marcador sin tanta resistencia. Ahora el Real Madrid se cita con el Athletic, Barça y Osasuna en las semifinales de la competición copera. Hay que recordar que el sorteo será el próximo lunes 30 de enero, a la expectativa de si puede darse otro clásico en la temporada.