La ofensiva vuelve a sacar de aprietos a los merengues. El Real Madrid consiguió una victoria con su cuota de sufrimiento (2-1) contra el Rayo Vallecano, en el Santiago Bernabéu. Los dirigidos por Carlo Ancelotti tuvieron que esforzarse por defender la valiente propuesta del conjunto de Andoni Iraola, quienes lograron controlar el esférico durante muchos minutos. La principal ventaja de los locales fue que lograron aprovechar los espacios ofrecidos por su rival en varios tramos del enfrentamiento, en donde nuevamente figuraron Benzema y Vinicius, pero no mostrando la contundencia necesaria para definir el partido a tiempo.
El director técnico italiano decidió apostar por el siguiente once para el derbi de equipos madrileños: Thibaut Courtos; Dani Carvajal, Eder Militao, David Alaba; Ferland Mendy; Casemiro, Toni Kroos, Eduardo Camavinga; Marco Asensio, Vinicius Júnior y Karim Benzema.
Comodidad merengue
Como era de esperarse, el Rayo Vallecano salió con la valentía característica que ha mostrado a lo largo del campeonato liguero. Manteniendo sus líneas juntas, presionando en los momentos ideales y verticalizando lo más rápido sus respectivos ataques. El único problema es que dejaron, en varias ocasiones, un espacio enorme a la espalda de su línea defensiva. Una situación que aprovechó el conjunto merengue a través de Asensio y Vinicius.
Justamente el atacante brasileño fue el que comandó la jugada del primer gol de la noche en el minuto 14. El esférico llegó a sus pies después de una buena prolongación de Benzema con la cabeza y posteriormente ganó la posición por su gran velocidad. La acción continuó con Asensio, que terminó asistiendo a un Toni Kroos que apareció por sorpresa desde la segunda línea para rematar con mucha potencia el balón. Fue inatajable para el portero rayista.
El grito de Toni Kroos tras anotar su gol contra el Rayo Vallecano / EFE
El plan del conjunto de Andoni Iraola no cambió en lo absoluto, por lo que insistieron en presionar la salida de balón del equipo merengue. Lograron disparar en dos ocasiones al pórtico de Courtois, pero sin llegar a exigirse demasiado. Esa incapacidad para incomodar por completo la aprovechó el Real Madrid con la nueva aparición goleadora de Karim Benzema, que recibió un gran centro de Alaba desde el sector izquierdo para definir con mucha comodidad.
Sufrimiento
Del mismo modo, la segunda mitad tendría un guión parecido al de los primeros 45 minutos: con un Rayo Vallecano asumiendo riesgos en ataque y subiendo mucho su bloque para descontar en el marcador. Eso permitió que contara con situaciones muy peligrosas, pero a su vez abrió la puerta a numerosos contragolpes del cuadro dirigido por Ancelotti. En ese sentido, tanto Vinicius como Asensio pudieron aumentar la ventaja; aunque el disparo del brasileño fue despejado por un defensor y el remate del español fue detenido por Dimitrievski.
El transcurso de la segunda parte fue con un Real Madrid mostrando una versión más reactiva, aguardando pacientemente desde su campo para contragolpear con sus rápidos delanteros. Tranquilamente pudieron anotar otro tanto que fuera la diferencia total, pero no definieron en esos momentos. Y esa imprecisión la pagaron caro, cuando en el minuto 76 llegaría el tanto del descuento a través de la figura de Radamel Falcao, que cabeceó con su característico instinto goleador para superar a Courtois.
Falcao hace presencia goleadora en el partido contra el Real Madrid / EFE
La tensión se apoderó del Santiago Bernabéu, especialmente porque el equipo generó dudas con respecto a si podía mantener esa mínima ventaja. Los merengues se salvaron de manera milagrosa en dos ocasiones en el tramo final; primero con despeje sobre la línea de Kroos y después con un disparo tremendo desde fuera del área que sacó Courtois. Cierre de partido de terror para el equipo de Ancelotti, que finalmente se llevó el triunfo con más dudas que certezas.