El Real Madrid, como el resto de clubes españoles, es consciente de que equipos como el PSG y los ingleses les están dejando atrás, y trabaja para paliar la situación. Desde hace años, Florentino Pérez ha soñado con vestir a Kylian Mbappé de blanco, algo que el Barça podría haber facilitado este verano.
Mbappé con la selección francesa / Équipe de France
La ayuda inconsciente del club catalán puede haberse dado hace más de una semana gracias a la salida de Leo Messi en dirección al Paris Saint-Germain. Este fichaje, que parece diseñado por el PSG para tener el mejor tridente del planeta fútbol, no parece gustar demasiado a Mbappé, que fue el que más tardó en dar la bienvenida a Messi.
La carambola perfecta
El francés sigue con su sueño de infancia: jugar en el Real Madrid y ser la gran estrella de un equipo, algo que de momento no ha podido ser con Neymar y Griezmann a su lado en club y selección respectivamente, y ahora habría que sumar a Leo Messi a la lista.
El PSG, que ve en Messi a su nueva gran estrella, depende menos de Kylian Mbappé: si se diera la circunstancia de que el PSG debiera liberar el salario de una de sus estrellas, el elegido sería el francés. Pero el Fair Play Financiero, al menos de momento, no va a afectar al club parisino. Lo qué si afecta a su futuro es el contrato de Mbappé, que finaliza el próximo verano.
Mbappé celebrando un gol con el PSG / PSG
Esta situación contractual limita a Al-Khelaïfi, que tiene dos opciones: o le vende ahora y no disfruta del tridente que ha diseñado para esta temporada, o se niega a escuchar ofertas para confiar en poder renovarle durante el año o verle salir gratis. Lo que está claro es que el jugador quiere irse, algo que no parece que vaya a cambiar, y ahí es donde entra el Real Madrid.
A romper la hucha
Florentino Pérez, de querer el jeque venderle este verano, deberá hacer un importante desembolso para el cual lleva tiempo ahorrando. Desde el fatídico fichaje de Eden Hazard, el Real Madrid se ha centrado en vender algunas de sus estrellas y promesas con tal de hacer caja para pagar el nuevo estadio y un gran fichaje, el de Mbappé.
Eden Hazard y Florentino Pérez en una imagen de archivo / EFE
A la salida de Varane, oficializada la pasada semana, se le suma la de Martin Odegaard de este miércoles. Aunque se desconocen oficialmente las cifras de la operación, Florentino sumará liquidez a sus arcas y está muy cerca de poder acometer la operación que más desea.
De darse esta operación, los claros vencedores serían Florentino Pérez y el Real Madrid, que se harían con una de las mayores estrellas del mundo del fútbol, pero también Javier Tebas, que volvería a tener un jugador al que vender como cabeza de cartel de la Liga, competición que preside.