El hermetismo del Real Madrid en la gestión de los audios

El Real Madrid es un búnker. Es tal la seguridad que le rodea que todo parece estar bajo control. Son pocas las cosas que se escapan desde dentro del club. Le hacen derrochar firmeza y autoridad, ya sea un asunto positivo o negativo. Pocos son los momentos de zozobra vividos por Florentino Pérez, principal figura del madridismo.

Florentino Pérez en una imagen de archivo / EFE

Florentino Pérez en una imagen de archivo / EFE

Sin embargo, hace un mes todos los aficionados al fútbol y los que no lo eran pudieron tener acceso a un contenido delicado para el mandatario merengue y que, indirectamente, afectaba a la imagen de la entidad. Fueron unos audios muy suculentos. Demasiado suculentos. El Confidencial sacó en exclusiva ese material que dio la vuelta al mundo. Eran unos comentarios y críticas de Florentino Pérez, “off the record”, sobre jugadores, exjugadores, periodistas, medios de comunicación y demás. Gente muy importante al fin y al cabo.

La postura adoptada: el silencio

El club cerró filas. Nadie habló. Se cerraron en banda hasta que la tormenta pasó. Era un huracán que tenía que tocar tierra, hacer daño e irse. El Real Madrid optó por el silencio. Usó sus herramientas para minimizar los daños, ya que se trataba de una crisis sin precedentes. Nadie saldría bien parado si es grabado en conversaciones privadas. Ha pasado un mes. Y no ha habido consecuencias directas en el club y en su figura más importante: el presidente. Han salido indemnes. O incluso reforzados. Como máximo mandatario de la entidad de Chamartín, se decretó un hermetismo que prohibía hablar sobre el tema. Era lo mejor para el club y así se hizo. Fue un asunto tan serio que lo mejor era adoptar esa postura. Era conservadora sí, pero quizás fue la elección adecuada.

El Madrid exigirá medidas

Los abogados de Florentino Pérez ya están trabajando en una demanda contra el periodista José Antonio Abellán y El Confidencial por la publicación de las conversaciones privadas. Esta será en defensa del honor, de la intimidad y de la propia imagen. Así lo anunciaron vía comunicado oficial. “He puesto el asunto en manos de mis abogados, que están estudiando las posibles acciones a ejercitar” comentaba el comunicado en el que señalaban a El Confidencial y a José Antonio Abellán. Todo apunta que seguirán con las entregas de filtraciones mientras no se va a los juzgados.

Caída del Real Madrid en el amistoso contra el Rangers / EFE

Caída del Real Madrid en el amistoso contra el Rangers / EFE

“El Transistor de Onda Cero revela que Abellán tuvo en 2011 una reunión con el vicepresidente del RM, Eduardo Fernández de Blas, en el restaurante Combarro, en la que chantajeó pidiendo 10 millones € para hacer desaparecer los audios grabados de manera ilícita y manipulada”, decía la publicación. Por lo tanto, el asunto queda de ahora en adelante en manos de la justicia, que tendrá que estudiar el caso y dar un veredicto mediante las pruebas presentadas por ambas partes. El tema cruzó fronteras. Sin embargo, dentro de los programas y medios nacionales no se hizo un caso muy grande. Siguió un ejemplo similar al del club, que no habló en absoluto. El juez o la jueza dictará sentencia.