La Eurocopa llega a sus últimos partidos, y uno de ellos es la semifinal que Italia y España disputarán este martes en Wembley. Pese a que el último partido de Eurocopa en la que se vieron tuvo final feliz para los azzurri, que en 2016 eliminaban a la Roja por 2-0 y avanzaban a cuartos, hay un precedente más reciente que invita al optimismo.
Los jugadores de España celebran con rabia el pase a semifinales de la Eurocopa / EFE
Los jugadores de España celebran con rabia el pase a semifinales de la Eurocopa / EFE
En septiembre de 2017, ambas selecciones se encontraron en el Santiago Bernabéu para disputar un partido de los clasificatorios para el Mundial de Rusia de 2018. En este partido, que España ganó por 3 a 0, hubo un claro protagonista: Isco Alarcón.
La exhibición de Isco
El partido empezaba especialmente bien para una España que en el minuto 14 se adelantaba en el marcador gracias a un excelente lanzamiento de falta del centrocampista malagueño. Isco, que jugaba en casa, cumplió una primera mitad excelente en la que generó ocasiones desde la segunda línea pero también bajó a recibir y sacar el balón desde su propio campo.
Isco firmaría su doblete en el minuto 40 al cruzar con su pierna mala un tiro desde fuera del área que sería imposible para el guardameta azzurri. En la segunda mitad siguió al alto nivel al que nos tenía acostumbrados por entonces, y si Carvajal hubiera batido a Buffon, Isco habría firmado una de las mejores jugadas asistentes de toda su carrera. Fue sustituido por David Villa a tan solo dos minutos del final, recibiendo una ovación por parte del público.
Después del partido, Isco admitió que estaba “contento por ayudar al equipo en una noche especial y redonda”. El jugador malagueño consideró que la Roja era “justa vencedora”, y valoró que su rol como falso 9 no tenía tanta importancia como la “actitud” de los jugadores.
La selección italiana celebra su pase a semifinales de la EURO 2020 / EFE
La selección italiana celebra su pase a semifinales de la EURO 2020 / EFE
Más ganas de revancha
Mes y medio después de ese partido, Italia se quedaría fuera de un Mundial en la fase previa, algo que no sucedía desde 1958. Los puntos perdidos ante España podrían haber enmendado eso, así que quizás los italianos salgan con más ganas de las que ya tienen recordando ese partido y tantos otros, como los de 2008 o 2012.
En los 37 partidos que Italia e España se han enfrentado, cada selección ha ganado once y se han empatado quince. Esta igualdad se desequilibrará este martes a las 21.00, momento en el cual las dos selecciones se jugarán el pase a la final de la EURO 2020. Los de Luis Enrique llegan al partido seguros de ellos mismos tras vencer agónicamente a Suiza en los penaltis y a Croacia en la prórroga, mientras que los italianos llegan después de ganar los cinco partidos que han disputado. Eso sí, tendrán la baja de Spinazzola, carrilero que había sido uno de los jugadores más destacados del cuadro azzurri en lo que llevamos de torneo, mientras que la Roja no podrá contar con Pablo Sarabia.
El ganador del encuentro disputará la final de la Eurocopa el próximo domingo a las 21.00 con el conjunto que se imponga en el Dinamarca-Inglaterra, que tendrá lugar este miércoles a la misma hora.