Se termina un mes de enero pésimo para los intereses del Real Madrid. En poco más de dos semanas, los pupilos de Zinedine Zidane se han despedido de dos competiciones y han puesto las cosas muy complicadas en la Liga. Cayeron en semifinales de la Supercopa de España contra el Athletic Club (2-1) y contra el Alcoyano (2-1) en Copa del Rey.
Este sábado naufragaron contra el Levante en casa, en Valdebebas (1-2). El conjunto blanco se vio superado desde los primeros minutos por los granotas. En el minuto 7, Eder Militao facilitó las cosas autoexpulsándose. No hubo reacción por parte del banquillo, dirigido por David Bettoni, pues el primer entrenador sigue confinado por coronavirus.
Pésimas decisiones
En los medios de comunicación de la capital y las redes sociales cargaron contra Zinedine Zidane. Con numerosas bajas, jugó con lo que tenía. Muchos le siguen tirando en cara que apueste por Eden Hazard pese a estar en un estado de forma pésimo. A la hora de juego, dio entrada a Vinicius Junior.
Zidane, cabizbajo tras la derrota en Alcoyano / Redes
Pero lo más sorprendente fueron los últimos cambios, cuando tenían que remontar. Salieron en el minuto 82 al terreno de juego Arribas y Mariano por dos de los jugadores ofensivos con más pólvora de la plantilla: Karim Benzema y Marco Asensio. Apenas generaron ocasiones peligrosas.
Bettoni, en rueda de prensa después del partido, esquivó la polémica con un “el ADN del club es luchar hasta el final. Yo creo que hemos presionado muy alto, una señal positiva. Hay que valorar el esfuerzo de los jugadores. Decepcionado, sí; pero con actitud. Creo que hemos luchado hasta el final”.
Fecha límite
A Zidane se le empieza a terminar el crédito en el Santiago Bernabéu. Florentino Pérez tiene marcado en el calendario la fecha que puede decidir el destino del galo. Será, como no, en la Champions League, después del choque contra la Atalanta de Bérgamo. Si caen eliminados, habrá revolución.
Aunque los merengues parten como claramente favoritos, los lombardos practican un juego ofensivo, muy vistoso y que ya ha demostrado lo que es rendir en la élite. El curso pasado se plantaron en cuartos de final de Europa cayendo eliminados contra el PSG, finalista de la última edición.
Los jugadores del Atalanta celebran su gol contra el PSG | EFE
La ida será en Bérgamo el 24 de febrero y la vuelta el 16 de marzo en Valdebebas. Dos partidos claves, dos finales en las que Zidane se juega algo más que pasar a cuartos de final en competición internacional. Otro pinchazo sonado, lo dejarían sentenciado. Antes, jugarán contra Huesca, Getafe, Valencia y Real Valladolid.
Sin Supercopa, sin Copa y a siete puntos del líder --con dos partidos más-- , el Real Madrid se lo vuelve a jugar todo en la Champions League. No son los claros favoritos ni mucho menos para alzar la orejona, pero suelen dar la cara en Europa. Un pinchazo inesperado contra la Atalanta precipitaría la tan esperada revolución en Chamartín.