El futuro de Sergio Ramos sigue siendo una completa incógnita. El capitán blanco y emblema del madridismo lleva meses negociando con Florentino Pérez su renovación. Su contrato finaliza en verano de 2021, por lo que en pocos días ya podrá negociar su futuro libremente. Y marcharse de Chamartín es una opción que cada vez coge más fuerza.
El de Camas exige al club merengue una extensión por dos años y una subida importante de su sueldo. Unas demandas no por su actual rendimiento, que con 34 años deja mucho que desear; sino que lo argumenta por todo lo que ha dado al Madrid durante más de diez años. Justicia esta subida salarial por su pasado glorioso, sin tener en cuenta la rebaja que ha sufrido la plantilla hace pocas semanas ni el futuro del club en época de pandemia.
Una foto de Sergio Ramos y Florentino Pérez / EFE
Hasta el momento, Florentino no está por la labor de acceder a sus deseos, aunque sabe que su papel en defensa sigue siendo fundamental. Una decisión de este tipo podría hipotecar a la entidad durante los próximos años. En cambio, la reciente renovación de Modric permite al sevillano presionar todavía más a la cúpula madridista.
Mourinho, al acecho
Sergio Ramos no descarta nada. Si no consigue el contrato que busca, explorará la felicidad en otro lugar. Son varias las propuestas que contempla. No repudia dar el salto a Estados Unidos, China o incluso Qatar; aunque su principal objetivo es competir en un equipo de primer nivel, para llegar en condiciones al Mundial de 2022.
En este sentido, en las últimas horas se le habría abierto una alternativa sorprendente, pero que podría encajar con lo que busca. Según apunta el rotativo inglés Mirror, el Tottenham de Jose Mourinho buscaría un central con experiencia para reforzar su zaga, y liderarlos a conquistar la Premier League (están a seis puntos del liderato). Y Sergio Ramos cumpliría con todos estos requisitos. No sería una operación fácil, sobre todo a nivel económico, y teniendo en cuenta que el club londinense se hipotecó en la construcción de su nuevo estadio.
Sergio Ramos, junto a Mourinho en su etapa en el Madrid | EFE
No obstante, el técnico luso no dejará de intentarlo. Un defensa veterano pero de garantías. Una incorporación como la de Thiago Silva por el Chelsea. Hay que destacar que la relación entre Mourinho y Ramos es más que buena. The Special One y su pupilo congeniaron a la perfección en su etapa en el Madrid (2010-2013). Se trata de un futbolista que concuerda perfectamente con su manera de entender el fútbol, y su estilo de juego luchador, violento y agresivo. Veremos cómo acaba solucionándose un culebrón que, mientras sigue alargándose, provoca cada vez más rumores de salida.