Gareth Bale se ha convertido en un auténtico dolor de cabeza para el Real Madrid y Florentino Pérez. El club le sigue buscando una salida, pero el jugador no está por la labor de recalar en cualquier sitio y no tiene prisa alguna. El presidente se niega a darle la carta de libertad y las opciones de solucionar el culebrón se reducen y mucho.
Una posible solución que apareció este lunes en la capital es que el galés se marchara cedido al Manchester United. Según informa el periódico británico The Times, el entorno del extremo no ven muchas posibilidades de acuerdo, pero los red devils están dispuestos a insistir en el tema.
Gareth Bale en un partido del Real Madrid / EFE
El verdadero deseado de Ole Gunnar Solksjaer es Jadon Sancho, extremo del Borussia Dortmund, que lleva meses sonando en Old Trafford. Piden 100 millones de euros por él y la situación económica que deja la pandemia, sin muchos movimientos, enrocan bastante la operación.
Bale solamente se irá del Santiago Bernabéu si algún club le garantiza percibir al menos los 15 millones de euros netos que gana en el club blanco y cobrar los dos años que le quedan de vinculación. Tiene contrato hasta verano de 2022 y las prisas deben ser de Florentino Pérez y su equipo para sacárselo de encima.
Neymar, Messi y Suárez
La situación del de Cardiff se asemeja a la que ha vivido el Barça en los últimos tiempos con el tridente Neymar Junior, Leo Messi y Luis Suárez. El brasileño se fue al PSG para ganar mucho más dinero en Francia y encima denunció al club para cobrar una prima de fidelidad alegando que era de renovación. Finalmente, la justicia dio la razón a los culés.
Por parte del capitán, amenazó con salir este verano y, cuando vio que no se podría ir gratis, puso el freno y anunció que se quedaba una temporada más en el Camp Nou. Irse con traspaso le suponía renunciar a parte del salario que había acordado en su equipo de destino.
Una foto de archivo de Suárez, Neymar y Messi en un entrenamiento con el Barça / FCB
El que tampoco quiere renunciar a su salario es Luis Suárez, que presiona para cobrar los 30 millones de euros brutos que invierte el Barça en él por temporada. El club no le pagará la totalidad, pero sí que apunta que lo hará con una parte para que coja destino a la Juventus de Turín.
Por todo esto, se les puede calificar de peseteros, pero Bale los supera a todos. Después de llevar varias temporadas haciendo pena con el conjunto blanco, sigue empeñado en que le den la carta de libertad cobrando los dos años que le quedan de contrato. Situación límite y lamentable en el Bernabéu.