La historia de cómo Florentino Pérez y Zidane dejaron tirado a Van de Beek

Todas las informaciones apuntaban a que Van de Beek sería nuevo jugador del Real Madrid este verano. De hecho, su propio representante aseguró que su contrato estaba casi cerrado, y solo faltaban algunos flecos. Sin embargo, en cuestión de semanas todo cambió. Sin un motivo aparentente. Y finalmente fue el Manchester United el que se hizo con sus servicios. 

El propio centrocampista holandés así lo reconoció, en una entrevista a De Teleegraf: "Como sabéis estaba cerrado con el Real Madrid y los clubes tenían también un acuerdo, pero por alguna razón al final todo esto no se cumplió". Van de Beek explicó que en un principio se sintió frustrado, pero no tardó en pasar página. "Al principio te sientes enfadado y te preguntas si una oportunidad así va a aparecer de nuevo. Supongo que lo que pasó fue que los jugadores que se iban a marchar del Madrid se quedaron y que por eso el club se retiró", comentó. 

Van de Beek, en una acción ante el Real Madrid, durante su etapa en el Ajax | EFE

Van de Beek, en una acción ante el Real Madrid | EFE

Uno de los grandes motivos por los que considera que el conjunto blanco le descartó fue por las pérdidas provocadas por el coronavirus, y por la incapacidad de desprenderse de algunas vacas sagradas. No obstante, hay una causa mucho más tajante: el capricho de Zinedine Zidane por Pogba. 

Pogba, Camavinga o nadie

En sus dos etapas en el banquillo madridista, no ha habido verano en el que el técnico francés no intentase convencer a Florentino Pérez para fichar a Paul Pogba. Es su gran deseo para la medular. Y una de las cosas que ha demostrado el entrenador francés en su carrera es que, cuando se le mete algo en la cabeza, es imposible hacerle cambiar de opinión. Y sino, que se lo digan a muchos de los canteranos que han desperdiciado temporadas en el banco del Bernabéu. 

Paul Pogba durante un partido con el Manchester United /REDES

Paul Pogba durante un partido con el Manchester City /REDES

No obstante, la llegada de Pogba al Madrid se convirtió en un imposible, porque el United se cerró en banda a negociar por él. Ante esta negativa, Zidane cedió. Pero solo un poco. Su nuevo empeño pasó a ser el joven Camavinga, que no tardará en dar un salto a un grande. Y ahí estará el Madrid de Zidane para intentar convencerlo. 

El míster blanco no es muy propenso a arriesgar, o a cambiar su forma de pensar. Van de Beek nunca fue un fichaje que le emocionase. Y no tardó en boicotear su llegada a la entidad de Chamartín, pese a que el acuerdo con el Ajax era firme y todas las partes mostraban su predisposición. Zidane volvió a salirse con la suya.