El Real Madrid es el nuevo líder de la Liga. El conjunto blanco aprovechó el empate del FC Barcelona en el Sánchez Pizjuán y se aupó a la primera posición tras vencer a la Real Sociedad. El equipo dirigido por Zinedine Zidane ha encadenado tres victorias en los tres primeros encuentros postconfinamiento.
Gerard Piqué ya advirtió en Sevilla que "viendo las dos jornadas que llevamos, será muy difícil que el Real Madrid pierda puntos". El central culé no se refería precisamente a la regularidad de la entidad de Chamartín, sino a las ayudas arbitrales que recibieron los merengues en los partidos ante Eibar y Valencia.
Detalles
Piqué recordó, sin decirlo, el gol de Kroos frente al conjunto armero. Los blancos se adelantaron en el marcador en el 4' tras un trallazo del centrocampista alemán. En la misma jugada, Benzema había recibido el esférico en una posición muy dudosa. Con la imagen de la televisión parecía que estaba en fuera de juego, pero el VAR demostró que no era así.
Publicación del fuera de juego de Benzema contra el Eibar / Twitter
Más grave fue lo que sucedió en el choque ante el Valencia. Rodrigo adelantó a los suyos en el 20' tras aprovechar un mal rechace de Varane. A priori, el tanto debía ser legal. Pero no fue así. El colegiado, tras consultarlo en el monitor del VAR, dictaminó que Maxi Gómez, que sí estaba en posición ilegal, molestó al zaguero francés. El Real Madrid acabó ganando 3-0.
Increíble
Lo del Valencia ya fue escandaloso, pero quedó en una minucia tras el partido de Anoeta entre Real Sociedad y Real Madrid. El colegiado Xavier Estrada Fernández y el VAR cometieron una serie de errores que, curiosamente, todos se decantaron hacia el mismo lado. El hecho de que el codazo de Casemiro a Mikel Merino se quedara en amarilla fue solo el principio.
Lo que sucedió en la segunda mitad es inédito. Primero, Estrada se inventó un penalti sobre Vinicius que ni siquiera llegó a consultar en el VAR. El delantero brasileño definió mal, como de costumbre, cuando estaba ante Remiro, y se tiró al suelo al notar el contacto de Diego Llorente. El zaguero txuri-urdin no hizo tanta fuerza como para derribar al extremo.
Sergio Ramos celebrando su gol / REAL MADRID CF
La desvergüenza podía ser aún mayor. Januzaj, en el 68', batió con un zurdazo desde la frontal a su compatriota Courtois. Cuando la Real ya había celebrado el gol, el colegiado lo anuló porque Mikel Merino, en fuera de juego, teóricamente tapaba la visión del arquero madridista. El centrocampista hizo todo lo que estuvo en su mano para evitar entrar en contacto con el balón.
Estrada Fernández y el VAR redondearon la noche dos minutos después. Concedieron el gol de Benzema después de que el delantero francoargelino controlara el esférico con el brazo. Y ahí sí que no había apreciación posible. Con 0-2, el Real Madrid respiró aliviado, algo que no hubiera podido hacer con 0-0, 1-0 o 1-1.