La nueva normalidad nos trae viejas discusiones. Y en el Real Madrid también. Nos fuimos al parón con el eterno debate sobre qué centro del campo debía ser el titular en el equipo blanco: ¿aquellos que han hecho méritos o los que más han dado en los últimos años?
Aunque la respuesta no debería albergar dudas, en los grandes equipos las jerarquías tienen un papel indiscutible. A veces, incluso generando problemas. Contra el Eibar (3-1), Zinedine Zidane apostó por el tridente en la medular que los merengues se han aprendido de memoria en los últimos años: Casemiro, Luka Modric y Toni Kroos.
Celebración del gol de Kroos en el Madrid - Eibar / EFE
Muchos se preguntaban dónde estaba Fede Valverde, la mejor noticia del madridismo desde que empezó la Liga. El Pajarito tuvo problemas físicos en el regreso a los entrenamientos, pero se espera que vuelva a desbancar al croata o al alemán en el once más pronto que tarde. Ha hecho méritos para ello. Este domingo, nuevo examen de valentía para el míster contra el Valencia.
Kroos y Modric, en la cuerda floja
Desde la capital apuntan que la salida de Luka Modric este verano parece inevitable. Este curso ha pasado a ser un suplente de lujo y es que su rendimiento ha dado un bajón considerable. Algo parecido le está pasando a Toni Kroos que, aunque marcó un buen gol contra los armeros, empieza a desesperar al presidente.
Es cuestión de poco tiempo que vuelvan a consolidarse en el centro del campo la dupla Valverde-Casemiro y el otro interior sea el que genere debate. El uruguayo ha aportado a la fecha a Zidane una alternativa para el cambio de formación y un desgaste físico que no ofrecen los dos veteranos.
Alba y Valverde disputando un balón en el clásico / EFE
A todo esto, se debe tener en cuenta que el próximo verano podrían jubilar definitivamente a Kroos y Modric. Florentino Pérez trabaja en la incorporación de un centrocampista de presente y, a poder ser, de futuro. Suenan nombres como Eduardo Camavinga, Paul Pogba o Donny van de Beek.
Isco y James, fuera de competición
La lucha por un sitio en la medular es tal que los cuatro no dan entrada a otros nombres. Isco ha tenido minutos, pero no ha sido donde muchos le ubicaban en la pretemporada. Zidane lo coloca como mediapunta o de falso extremo. Allí tiene ahora la competencia de nombres como Asensio, Hazard, Vinicius o Rodrygo.
Algo parecido le pasa a James Rodríguez, un enganche sin minutos. Tenía que salir traspasado, pero finalmente se quedó. Solo ha jugado 13 partidos --la mayoría de suplente-- y no hay sitio para él en el equipo. Entre los problemas en la cadera y en la rodilla, se ha perdido muchos partidos y difícilmente consiga un puesto como titular en lo que queda de campeonato.
Isco, hablando con ZIdane en un partido del Real Madrid | EFE
A todo esto, es prácticamente imposible que no haya una salida en tromba de jugadores blancos este verano. Modric y James parecen tener los días contados en el Santiago Bernabéu, mientras Fede Valverde se va consolidando y se espera la llegada de un tercer centrocampista que jubile a Kroos.