El Real Madrid se enfrentará este verano a un mercado de fichajes determinante para su futuro deportivo. Florentino Pérez no puede permitir una nueva temporada desastrosa, tanto a nivel de juego como también de resultados. Estas carencias, junto a la necesidad de rejuvenecer el vestuario implicarán muchos movimientos en la plantilla en el próximo verano.
Una revolución que la tendrá que llevar a cabo el club madridista en un periodo de traspasos completamente inusual. Las pérdidas provocadas por el coronavirus en todos los grandes clubes implicará un mayor número de traspasos llevados a cabo mediante intercambio de jugadores o cesiones. Adiós a las operaciones multimillonarias, ya que ningún equipo podrá acometerlos. Una situación de la que tampoco ha podido zafarse el Real Madrid.
Los jugadores del Real Madrid en un entrenamiento / EFE
No obstante, hay que destacar que el contexto del conjunto de la capital es mucho más esperanzador. Aunque también les ha afectado de lleno la suspensión de actividades y competiciones, con importantes pérdidas en taquillaje, ticketing e incluso en marketing; la realidad es que podrán suplir estas carencias con ventas.
La entidad merengue contará el curso que viene con hasta 37 jugadores, con la vuelta de los cedidos, por lo que intentará realizar una limpieza importante para conseguir presupuesto para sus fichajes estelares. Uno de los grandes objetivos es la promesa del fútbol francés, Eduardo Camavinga. Un futbolista que, según se cree en la capital, si no hubiese sido por el coronavirus, ya sería jugador blanco.
Cuestión de tiempo
El Real Madrid lleva ya mucho tiempo siguiendo al joven jugador francés, de solo 17 años. Muchos partidos, mucho espionaje e informes positivos, que incluso llevaron a iniciarse los contactos, con respuesta positiva por todas las partes, el pasado mes de febrero. Antes de que toda la pandemia llegase a Europa.
Por tanto, y ante la previsión de que las pérdidas seguirán creciendo por los partidos a puerta cerrada, Florentino Pérez ha decidido dar preferencia en estos momentos a dar salida a jugadores, para conseguir el presupuesto necesario para después ir a por grandes traspasos, entre ellos Camavinga, cuya operación no bajará de los 60 millones de euros.
De hecho, según avanzó el diario Marca, por la zona noble blanca se ha llegado a escuchar frases muy optimistas sobre la llegada del joven francés: "Si no llega a ser por todo lo que ha pasado, ya estaría fichado". Tanto el mismo centrocampista, que ve con muy buenos ojos su llegada al Santiago Bernabéu, como su agente, Moussa Sissoko, saben que es cuestión de tiempo, y están dispuestos a esperar al conjunto madridista.