No corren tiempos fáciles para el mundo del fútbol. La crisis económica derivada del coronavirus ha impuesto una nueva realidad a la que los clubes se tendrán que adaptar en las próximas ventanas de fichajes. No habrá tantos movimientos multimillonarios como en mercados anteriores.
El Real Madrid no se escapará de este duro golpe. Las cuentas blancas también se están viendo afectadas y, poco a poco, se va frustrando uno de los fichajes estrella que tenía en mente Florentino Pérez. Este no es otro que el de Kylian Mbappé. Su actual club, el PSG, no quiere dejarlo escapar este verano y menos si no abonan lo que piden.
Esta situación ha provocado un mosqueó muy grande en el presidente merengue. Aunque llegó Hazard el pasado verano, sigue sin tener un sustituto de garantías de Cristiano Ronaldo, alguien que les coloque como uno de los clubes más temidos de Europa. La próxima temporada se cumplen tres cursos sin el portugués.
La paciencia que se termina
Como ya hemos explicado anteriormente en Culemanía, Florentino no quiere ir a la desesperada a por Mbappé, como hizo en un pasado con Neymar. Su plan es esperar, ser prudente y, según ya habló con el entorno del jugador, sus caminos se terminarán cruzando tarde o temprano.
Aunque se apueste por la paciencia, la situación empieza a desbordar al presidente: ya son tres veranos que le van detrás sin éxito. Se le intentó firmar en 2017 cuando dio el salto al PSG pero en el Santiago Bernabéu nadie le garantizaba los minutos necesarios, solo tenía 17 años. La banda izquierda del Madrid era de Cristiano.
En el Parc des Princes ha explotado y se ha puesto a la altura de Neymar Junior. Por ese motivo, ahora el PSG no contempla una salida. Para evitar tensiones con Al-Khelaifi, quieren esperar a hacer una ofensiva en una especie de pacto de no agresión que se está alargando más de lo que el querría.
Este verano tenía que ser el momento ideal para ir a por él, así lo habían hablado. Pero no será así. El Real Madrid no tiene la suficiente liquidez para abonar el precio multimillonario que quiere el coloso francés -en torno a los 300 millones de euros- ni el PSG lo quiere dejar salir ahora mismo.
El escenario ideal de 2021
Dentro de toda la desesperación del madridismo, hay un punto positivo. El jugador todavía no ha renovado su contrato y en verano de 2022 quedaría libre. Por lo tanto, si quiere tener ingresos con Mbappé, tendrán que dejarlo salir el próximo verano. Los blancos son los grandes favoritos pues tienen un acuerdo verbal.
Nasser Al-Khelaifi con Kylian Mbappé en su presentación con el PSG / EFE
El precio de traspaso se verá también reducido, lejos quedarán los 300 millones que piden por él ahora. El jugador se podría acoger al artículo 17 de la FIFA, el Reglamento sobre el Estatuto y la Transferencia de Jugadores de la FIFA. Según esta norma, un futbolista que ha estado tres años o cursos en un mismo club sin renovar, le pueden fijar un precio a su libertad.
Aunque es un proceso de larga duración, unos diez meses aproximadamente, y provocaría tensiones entre el futbolista y el equipo, en ningún caso serían los 300 kilos que pedían los parisinos. Lo más cómodo para Madrid, PSG y Mbappé es negociar una salida. Eso sí, Florentino tendrá que seguir esperando.